La nueva entrega de
La campaña nos permite disfrutar de los mejores gráficos y las escenas más impactantes, no dejes de observar el cristal de la carlinga del avión de combate, los efectos del agua, los cambios en la visión por las luces…
El guión del juego sin ser ninguna maravilla puesto que nos encontramos con la típica historia de intriga con flashbacks y giros de guión (como todos los juegos de acción actuales, si no hacen un flashback se mueren).
La jugabilidad te sumerge en una guerra con todos sus componentes, te hará sentir dentro del meollo, te aturdirás con las explosiones y disparos, te emocionaras al avanzar con tu pelotón, tendrás miedo al ver caer a tus compañeros y oír silbar los disparos encima de ti. Y sufrirás cada vez que tu mano temblorosa pida ayuda al caer.
Ni que decir tiene que en nivel difícil el desafío es completo y tendrás que andar con cuidado, a la mínima de cambio te tumbaras (si te da tiempo) y no sabrás ni de dónde te disparan.
Multijugador, hemos llegado a la parte que más me gusta de todos los juegos. He de decir que tengo un regusto agridulce, aunque seguramente una parte es porque necesito (si lo necesito) hacer más horas de multijugador para sacarle todo el jugo.
En las partes agrias del juego he decir que tengo varios puntos que no me terminan de gustar.
· La posibilidad de poder tumbarte, hace que prácticamente seas invisible para cualquiera que pase corriendo. Esto implica que se multiplica la cantidad de camperos.
· Las opciones de linternas para las armas, láseres, y demás luces de señalización, visualización o desorientación son una jodienda. Molestan más que otra cosa, y en los escenarios oscuros dan la sensación de estar en una macro discoteca.
· Algunos vehículos son excesivamente poderosos, si se destruye a su equivalente contrario permite tener veda libre con el resto. Por ejemplo los reactores y algunos helicópteros. Por suerte no es nada fácil atacar a algo en suelo con un reactor.
· Si te toca un escenario muy grande (y hay algunos muy, muy grandes), no estás en una patrulla avezada y tus compañeros ansiosos se han llevado todos los vehículos sin esperar a nadie, tienes paseos realmente largos.
En las partes dulces no me adentrare en lo que otros ya se han dedicado a pelotear:
· Las armas son muy veraces, todas matan por igual y tienen muchas opciones. Los equipamientos de los diferentes tipos de soldados también son muy completos.
· Prácticamente hay vehículos para todos, solo hay que esperar y puedes coger casi de todo, a veces vale más la pena coger un buen tanque o un camión artillado que esperar al jodido reactor; son muy complejos de manejar, difícil que mates algo y un poco decepcionantes. Probad los tanques anfibios, disparan despacio, pero cuando lo hacen valen la pena.
· Los escenarios son gigantescos, hay miles de opciones para defender y atacar, si hay cuellos de botella es que están hechos aposta para forzar el enfrentamiento.
· Al principio serás carne de cañón, no sabrás ni por donde te vienen los disparos, pero en muy poco tiempo (el aprendizaje es rapidísimo) ya estarás atacando, defendiendo como el que más.
· No sigas siempre al resto del grupo, prueba movimientos novedosos, caminos alternativos, escondrijos curiosos… Hay mucho por descubrir y no todo esta explotado.
Como en todos los juegos en red, el grupo tiene ventaja, pero un jugador solitario en una posición que los contrarios no esperen, puede destruir un grupo de varios jugadores. Los jugadores más avezados no tienen ventajas, solo más experiencia. A cualquiera se le puede sorprender.
En conjunto es un juego muy recomendable para jugar solo o en red aunque para saborearlo en condiciones lo ideal es hacer ambas cosas.
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